El domingo 25 de agosto 2019 participamos como CENTRO EDUCATIVO DIOS PADRE, por medio de sus abanderados de todos los niveles  y varias familias, de la CORONACIÓN DE NUESTRA MADRE Y REINA DE LA MISIÓN, LA UNIDAD Y LA VIDA, en el Santuario de Schoenstatt  «Nazareth del Padre, tierra de Unidad» en La Puntilla.

Todos tenemos nuestros pecados, esa debilidad que nos acompaña, esa gran frustración, esa gran tristeza. Esos que nos duelen mucho y que cuestan como acompañantes.

Está bien que reconozcamos a María como Reina, como co-redentora, como Madre. Pero a ella le enternece más que lleguemos también con nuestra gran piedra en el zapato, con esa herida que nos acurruquemos junto a ella. Ella nos saca el zapato, mientras nos mira y habla, nos saca la piedra, nos cura y nos hace mimos en los pies.

Que esta coronación sea una FIESTA DE LA MISERICORDIA, DE LA TERNURA, en la que nos animamos a poner en sus manos no sólo lo lindo, lo bueno, nuestros Capitales de Gracias, nuestros grandes sacrificios.

ORACIÓN DE CORONACIÓN

Querida Madre, Reina y Victoriosa tres veces Admirable de Schoenstatt:

Estamos nuevamente aquí, como Iglesia que peregrina en Mendoza junto a nuestros Pastores, para coronarte nuevamente. Hoy te proclamamos:

MADRE Y REINA DE LA MISIÓN, LA UNIDAD Y LA VIDA

Reina de la misión, regala a la Iglesia de Mendoza un nuevo Pentecostés. Danos fe en nuestra misión, derrama sobre nosotros gracias de santidad y capacidad apostólica fortificándonos en la coherencia e integridad- «El Señor que ha llenado, a la Iglesia, de dones con la Palabra, los santuarios, los sacramentos, la vida de las comunidades, el testimonio de sus santos, y una múltiple belleza (…)» nos de sabiduría para dar respuesta a las exigencias de la época actual.

Has que nuestros laicos sean testimonio vivo del Evangelio a través de una santidad de la vida diaria, fuerte y silenciosa que responda a los desafíos que emergen de la realidad que nos rodea.

Reina de la unidad, desde este lugar que anhela ser TIERRA DE UNIDAD, manifiesta la fuerza que surge de tu profunda unión a Jesús. Has que los espíritus se unan en la verdad y los corazones en el amor para que nuestra Patria encuentre la paz verdadera y estable. En Ti camine hacia el futuro en un diálogo fraterno que nos permita participar en la mesa común a todos los argentinos, aborreciendo el odio y construyendo la paz.

te pedimos especialmente por todos aquellos que tienen una tarea de conducción y servicio dentro de la sociedad: autoridades religiosas, civiles y sociales, padres, educadores, profesionales, artistas y todos los que deban conducir hacia el bien común, regálales la gracia de ser transparentes del amor paternal de Dios par todos nosotros.

Reina de la vida, no podemos avanzar sin tu poder maternal. las ideologías actuales penetran cada vez más los ámbitos mas íntimos de nuestra vida, se ha oscurecido la verdad y la justicia, no se reconoce el orden de ser querido por Dios.  Esta realidad nos supera, por eso volvemos a Tí, la mirada y te decimos: » Habla a tu hijo como cuando Él estaba en la tierra y ayudaba en apuros y penurias; dile: «No tienen vino ni alimentos»,y El, con certeza, escuchará nuestra súplica. «Madre y Reina de la vida confiamos en Tí»!!!

Madre y Reina de la misión, la unidad y la vida somos conscientes de que esto nos sobrepasa. Con amor filial te decimos:

«Manifiéstate a todo el mundo como la Gran Señal, ante quien desaparezcan la astucia del Demonio y la miseria terrena; en Ti encuentren los pueblos amparo y auxilio y te proclamen alegrmente como medianera de la Salvación.

Madre, aquí estamos, te ofrecemos nuestra pequeñez para que construyas con nosotros lo que te hemos imploramos en esta oración. ¡Nada sin Tí, nada sin nosotros!