Desde la perspectiva pedagógica LIBERTAD es lograr cierta AUTONOMÍA. La capacidad de decisión y el actuar en consecuencia con esa decisión. Nuestra escuela debe generar espacios para estimular decisiones y saber ser consecuente con ellas.

Cada mes nos reunimos como comunidad de educadores para formarnos en esta pedagogía de Schoenstatt y sus estrellas pedagógicas. Este mes tratamos sobre la LIBERTAD.

A través de un juego, el tutifruti, pudimos en grupos charlar sobre el significado de esta capacidad, las personas en quienes podemos reflejarnos en esta libertad y cómo, dentro de nuestras funciones podemos crecer en esta actitud.

Queremos que las estructuras de control sean las mínimas y necesarias, pero que la motivación y el espíritu sean siempre fortalecidos. La instancia fundamental tiene que ser interior y no tanto una instancia exterior de control. Las estrellas pedagógicas interactúan constantemente y se complementan. Si no hay un clima de confianza y respeto no lograremos avanzar en la libertad de acción y autonomía.

Van a ser importantes ciertas exigencias en el campo de aquellas decisiones que se han asumido. Ahí se puede ser más riguroso, porque si la persona asumió un compromiso debe cumplirlo, si asumió una responsabilidad tiene que desarrollarla. Este es el proceso educativo.

Como educadores debemos comprometernos en esforzarnos en conquistar nuestra libertad interior para ser coherentes con nuestro labor educativa. Que nuestra Madre Educadora, quien libremente dijo SI a los planes de Dios y fue fiel hasta el fin de sus vidas y nuestro fundador quien fue probado yendo a un campo de concentración, en la lucha de la libertad interior, nos ayuden a asumir esta conquista cada día de nuestra vida.

Agradecemos a todo el personal, la participación activa en estos talleres y el compromiso de hacer palpable en el lugar donde desarrolla su actividad esta rica pedagogía de LIBERTAD