El sábado 16 de marzo, en el Colegio Sagrado Corazón, participamos de la jornada diocesana de Pastoral cuyos objetivos fueron:

Experimentar el llamado a vivir la sinodalidad como un modo de ser Iglesia que escucha a Dios en la Palabra y su pueblo, para ser servidora del mundo con la alegría del Evangelio.

Iniciar un camino de reflexión en todos los espacios pastorales de la diócesis en clima sinodal, en orden a responder al llamado de Dios como Iglesia servidora de nuestra comunidad mendocina, en el contexto eclesial, social y político nuevo en el que nos encontramos.

Recibir la beatificación de los mártires riojanos, testigos de un sueño de Iglesia sinodal, profética, servidora del mundo como regalo de Dios para vivir con fidelidad nuestro ser Iglesia hoy en Mendoza.

Fue una experiencia comunitaria muy alegre, profunda y esperanzadora. Compartir la escucha con personas de distintas comunidades y sentirnos Iglesia con los mismos anhelos y preocupaciones.

Escuchamos a nuestro Obispo Marcelo Colombo que nos invitaba a vivir un tiempo de verdadera conversión del corazón, con conciencia de bautizados que como familia todos somos importantes, un DON para la IGLESIA, invitándonos a un tiempo de escucha del Espíritu Santo, de discernimiento comunitario y personal.

Nos comprometemos a adentrarnos mas en el importante acontecimiento de la beatificación de los mártires riojanos que nos animan a jugarnos por nuestra misión de cristianos en nuestros tiempos.

Sentimos que estamos en sintonía con nuestra Iglesia diocesana, que queremos escuchar a Dios en el HOY y con la mirada de Jesús y Maria poder dar respuestas concretas, siendo familia siendo HOGAR

Pudimos entregarle a nuestro Obispo una carta contándole de nuestros impulsos expresados en el lema anual.

Agradecemos esta posibilidad de compartir y caminar JUNTOS en nuestra Iglesia mendocina.