“La memoria nos ayuda a iluminar el presente y a generar el fututo en la vida de los pueblos y en nuestras propias vidas. La historia de la vida de los pueblos, que se fue construyendo en el tiempo, entre luces y sombras entre el dolor y la resistencia.  El 24 de marzo de 1976 es una fecha significativa para todos los argentinos ya que nos remite a uno de los hechos más tristes de la historia de nuestra patria.

Tengamos memoria para defender la verdad y la justicia. Es un día para conmemorar y rememorar la importancia que tienen los Derechos Humanos de todos los ciudadanos argentinos.

La escuela es el lugar privilegiado donde los acontecimientos de la vida de un pueblo siempre tienen un lugar especial, para festejar, para recordar, para reflexionar.

El 24 de marzo no es una fecha histórica más, porque no se recuerda a algún personaje de nuestra historia que fundó, creó o hizo algo para que nuestra Patria creciera. Tampoco festejamos con alegría uno fecha que nos llena de felicidad por un logro, un nacimiento o simplemente un cumpleaños.

El 24 de marzo de 1976 fue el resultado de muchos años equívocos y desencuentros, que lo único que generaron fueron más equivocaciones y ahondaron los desencuentros hasta convertirlos en una suerte de guerra civil.

46 años han transcurrido… día de la MEMORIA, por la VERDAD y la JUSTICIA.

La memoria es un acto que permite a nuestra mente traer de nuevo como en una película lo ocurrido. La memoria nos permite no repetir los mismos errores ni tropezar con la misma piedra.

La VERDAD de la mano de una MEMORIA que intenta no repetir los graves conflictos que como patria casi nos hacen hundirnos. Será la que por fin nos dará una Argentina más justa y soberana.

La memoria permite a los argentinos agradecer por estos 40 años con una democracia imperfecta pero que garantiza los principios básicos de la República, periodicidad, división de poderes, dictado de leyes para todos los habitantes, igualdad, equidad…

Dios bendiga nuestra PATRIA. Que La Mater nos guíe para que, NUNCA MÁS se considere la vida del otro, por equivocado que esté, como algo desechable… TODA VIDA VALE. SEAMOS VÍNCULOS DE ESPERANZA.

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